Marlaska castiga a De los Cobos con 7.000 euros menos al año en un puesto sin competencias
La destitución del coronel Diego Pérez de los Cobos no sólo es un golpe a su carrera, sino también a su bolsillo: pierde alrededor de 7.000 euros al año en complementos salariales. Su nuevo destino, anunciado por Interior tras purgarle por negarse a a informar sobre la causa judicial secreta del 8-M, supone apartarle de tareas sensibles o comprometedoras para el Gobierno.
El coronel De los Cobos, el gran damnificado por las purgas en la cúpula de la Guardia Civil que ha realizado el Ministerio del Interior en los últimos diez días, ha sido destinado a un nuevo puesto. Según comunica el departamento que dirige Fernando Grande-Marlaska, el ex jefe de la Comandancia de Madrid «ha sido destinado, a petición propia, en comisión de servicios en la Intervención Central de Armas y Explosivos en Madrid, dependiendo del General de la Jefatura de Armas, Explosivos y Seguridad». En esa nota, Interior también anunciaba que el sustituto de De los Cobos es el teniente coronel David Blanes.
Sin embargo, fuentes cercanas a este movimiento explican que no se ha tratado de una «petición propia», tal y como defiende Interior, sino una recolocación asumida en un puesto «apartado» de cualquier materia que pueda provocar «problemas a la Dirección General». Y mucho menos, al Gobierno.
Se trata de una recolocación a la que, según los reglamentos internos de la Guardia Civil, De los Cobos no se puede negar. El cometido de De los Cobos en este nuevo destino será el de lidiar con asuntos como incautaciones de armas, subastas públicas de catálogo de incautaciones, tramites administrativos o la concesión y renovación de permisos de armas a agentes de seguridad privada».
Un puesto objetivamente menor
En la Guardia Civil explican que pese a que «no hay misión pequeña» en el Cuerpo, la de De los Cobos está objetivamente mucho más vacía de competencias que las que venía desarrollando De los Cobos en la Comandancia de Madrid, a la que llegó tras ejercer como mando único de toda la Operación Copérnico contra el referéndum separatista catalán de octubre de 2017 . Una de las más importantes de la historia del Instituto Armado. De hecho, su testimonio en el juicio del 1-O fue clave para apuntalar la acusación contra los instigadores de aquel pulso al Estado. Y ahí se ganó la enemistad del separatismo, especialmente de ERC.
«En las películas americanas, cuando un policía cabrea al jefe, se le manda castigado al archivo, al sótano donde están las cajas. Pues eso es más o menos lo que le han hecho al coronel De los Cobos», explican a OKDIARIO fuentes de la Guardia Civil. «Ha pasado de ser un coronel en un puesto muy relevante a ser un coronel más de la Dirección General». De hecho, advierten que el ‘castigo’ no es sólo laboral, sino también económico: pierde gran parte de sus complementos salariales.
Importante bajada de sueldo
«Ocupar una jefatura de Comandancia como la de Madrid lleva aparejados complementos de sueldo importantes que De los Cobos pierde. Se queda sin su Complemento Específico Singular (CES). En un puesto como el suyo supone perder mensualmente unos 600 euros», explican.
En total, la destitución de De los Cobos le supondrá dejar de ingresar algo más de 7.000 euros anuales en concepto del complemento salarial por estar destinado en un puesto tan complejo y de tanta responsabilidad como lo es la Comandancia de Madrid, «una patata caliente constante», valoran desde la Guardia Civil.
Otras fuentes del Instituto Armado coinciden en esta valoración de que el nuevo destino de De los Cobos «se asemeja más a una vendetta que a un destino apetecible. El mensaje que le envían es que su carrera en la Guardia Civil ha tocado su techo y ahora a esperar la jubilación».
Purgado por Interior
Su nuevo nombramiento se produce apenas 24 horas después de que se diese a conocer el documento por el que se le destituía, firmado por la Directora General de la Guardia Civil, María Gámez. En él se argumenta que el «cese por pérdida de confianza» se debe a la negativa de De los Cobos a»informar del desarrollo de investigaciones y actuaciones de la Guardia Civil, en el marco operativo y de Policía Judicial, con fines de conocimiento». Gámez ya ha recibido su primera denuncia por estos hechos, como revela este miércoles OKDIARIO.
Se refieren a las diligencias secretas encargadas por la juez Carmen Rodríguez-Medel, titular del Juzgado de Instrucción Nº 51, que investiga un posible delito de prevaricación administrativa por parte del Gobierno al permitir manifestaciones en Madrid -como la del 8-M- pese a la grave amenaza del coronavirus sobre la salud pública.
De los Cobos, mientras, ya ha anunciado a través de su entorno que trabaja en un recurso judicial contra su destitución como jefe de la Comandancia de Madrid, que de prosperar podría suponer su vuelta al puesto. Sin embargo, fuentes asociativas que han manejado este tipo de procesos judiciales advierten que sus posibilidades de éxito «son mínimas, por no decir nulas. Esos recursos se pierden casi siempre».
«¿Y dónde está Corbí?»
En la Guardia Civil también comparan la destitución de De los Cobos y su nuevo nombramiento con la que sufrió el exjefe de la Unidad Central Operativa (UCO), Manuel Sánchez Corbí, también destituido por Marlaska en 2018. El hombre que dirigió a los agentes que resolvieron casos tan mediáticos como el de Diana Quer o el del pequeño Gabriel fue fulminantemente apartado por Interior después de que Corbí enviase un correo interno diciendo que la caja de los fondos reservados de la unidad estaba vacía y que se suspendían las investigaciones en marcha que tuviesen que recurrir a estas partidas.
«¿Dónde está Corbí hoy? ¿Tú lo sabes?», preguntan fuentes del Instituto Armado. «Le mandaron al SEPROSE y adiós», concluyen. Se refieren al nuevo destino que le concedió Interior a Corbí seis meses después de cesarle: el Servicio de Protección y Seguridad, una unidad más administrativa que operativa que se ocupa, principalmente, de distribuir agentes de protección en edificios públicos y de lidiar con las empresas de seguridad privada en temas de licencias y permisos (algo que también hace la Intervención de Armas a la que ahora está adscrito De los Cobos). El SEPROSE, como denunciaban las asociaciones de la Guardia Civil, está considerada como «la gran olvidada» en el Cuerpo. Con De los Cobos, dicen, Marlaska repite la misma historia.